6 de junio de 2008

MÁS TOMÁS




Tomás se niega a creer en la resurrección de Jesús, Cristo se le aparece y le dice: "Mira mis manos; acerca tu mano y métela en mi costado. Y no seas incrédulo sino creyente" (Jn20,24-29). Según otra tradición legendaria, difundida por los hechos de Tomás y la leyenda dorada, Tomás habría sido invitado por un invitado del rey de las indias, Gundoforo (o Gondoforo) a construir un palacio para su soberano. En lugar del palacio prometido, el apóstol anuncia que ha concebido para él un "palacio celeste" y distribuye el dinero recibido entre los pobres, ultrajado el rey lo arroja en prisión.






Esta piadosa leyenda me parece muy esclarecedora y explica ciertas posturas extra-taurinas vividas ayer en Las Ventas, la abstención de cumplimentar al Jefe del estado con el brindis por parte del matador y los repetidos bostezos del suegro de la periodista en la barrera, mutuos resquemores.


El pasaje evangélico se presta a una representación como la de Caravaggio en el XVII, habría que esperar hasta mediados del XIX para que se extendiesen las desagradables (estéticamente) devociones a las vísceras, véase Sagrado Corazón.


Otro Tomás también santo, Beckett, parece que tampoco terminaba de llevarse del todo bien con la realeza, y así termino asesinado, o tal vez sea aquello de las casualidades.












Perdonémosle el fondo musical, el fotomontaje me ha parecido bueno.

3 comentarios:

Pericoteo dijo...

El segundo de los invitados era un enviado, pero no puedo corregirlo, no sé porque no se ha guardado en el archivo de entradas, el de los bostezos Jefe de Estado y no de estado, aunque el sabrá, y santo Tomás Beckett acabó asesinado, no termino, y algo más habrá Tomás, dos o tras más...

Jaime Garcigonzález dijo...

También está el gran músico Tomás Obinonhe, sambista do Brazil, este que el padre de "nosotrush tudosh"según palabras de Vinicius de Moraes

Toquinho

Jaime Garcigonzález dijo...

uauauaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!