4 de julio de 2007

XLIII

Hoy cumplo cuarenta y tres años y no sé si son muchos o pocos, muchas cosas en ellos he tenido, no me quejo de lo que he disfrutado y he sufrido, quizás sin ambiciones e indolente, no he buscado hacer daño, pero sé que he dañado, precisamente a los que me han querido. Le agradezco a los dioses la mujer que me han dado, el recobrar con ella ilusiones perdidas, el sosiego, la calma, su infinita ternura, sus silencios...Tantas y tantas cosas, sentarme de mañana a esta mesa ordenada y abrir esta ventana a la calle, perdida, pequeña, sin salida, pero de nombre
inmenso.
Me consuelan los libros, con tiempo los disfruto y hoy como otro regalo al abrir uno de ellos gozo con unos versos de Jaime Gil de Biedma:

DE VITA BEATA
En un viejo país ineficiente,
algo así como España entre dos guerras
civiles, en un pueblo junto al mar,
poseer una casa y poca hacienda
y memoria ninguna. No leer,
no sufrir, no escribir, no pagar cuentas,
y vivir como un noble arruinado
entre las ruinas de mi inteligencia.
Y al leer a Gil de Biedma me acuerdo de Machado, de Manuel, y así tranquilamente transcurren las mañanas. He hablado de mi nacimiento, el día era propicio, otra ocasión habrá
para hacerlo de mis dos resurrecciones y de dos ciudades.

3 comentarios:

Jaime Garcigonzález dijo...

hastao bonitorcántico."más tolerancia y más protuberancias"gritaba un calvo con corbata amarilla-protección civilcon lunares lila.
Espero que sigamos cumpliendo años y dando la lata hasta.......

carmen dijo...

Jose Mateos en su último libro. "Cuanto mas amor se da mas amor se tiene", yo lo suscribo plenamente.

Elguapoelchuloeldelamoto dijo...

Hola torpedo, como ves me he introducido en éste tu rinconcillo malillo. De momento muchas felicidades de parte de los tres, que sigas cumpliendo años y a mi hijo veas crecer. Y con esto y un bizcocho a ver cuando nos vemos a las ocho.